Si usted no esté casada, un embarazo puede ser una de las peores noticias que usted podría recibir. Usted puede entrar en estado de choque, sentir miedo, consternación, culpa, o vergüenza. Probablemente se siente sola, con miedo pensando en las decisiones que ahora debe tomar. Especialmente, durante los próximos meses llegará el momento en que usted tendrá que decidir si va a criar esa nueva y preciosa vida. ¿Estaría usted dispuesta a hacerse cargo de él o de ella y ser una madre soltera?
Ante todo, entienda de que su bebe no es “un accidente”. Gústele o no, todas las acciones (bien sean de nuestra elección o la de otros) tienen “consecuencias lógicas”. Y una de las consecuencias naturales de la actividad sexual es el embarazo. Ya sea que usted piensa que esto es justo o injusto, usted tiene la capacidad de tomar lo que la vida le ha dado y sacar buen provecho de ello. Otras personas en su vida van a dar sus opiniones sobre lo que debería hacer, también puede suceder que usted cambie de idea diariamente.”
“Enfrentar un embarazo no planeado puede parecer sobrecogedor. Por tal razón es que sabiendo a dónde dirigirte para conseguir ayuda es importante. Hable con alguien en quien confías- tu pareja, tus padres, un pastor, un cura, o quizás un buen amigo. Las personas que se encuentran en el centro prenatal Latidos de Esperanza también están disponibles para ayudarte en estos momentos difíciles”.